miércoles, 19 de noviembre de 2008

M

Si nuevamente el infortunio se adueña inclemente de mi tiempo, y no tengo mas opción que depender de su designio, quisiera que ocurriera a tu lado. A tu vera.
Para regalarle a mi olfato el dulce aroma de tu cuerpo, para donarle a mi tacto el roce del aire que habitas.
Para premiar a mis ojos con ese rostro de niño herido, con esa mirada de pájaro cautivo en busca de cielos que no son los míos, en busca de paraísos que desconozco.
Quisiera que transcurra mi tiempo lentamente, más que ahora, para embriagarme en la dicha de saberte, para superar esta incógnita dolorosa que es tu ausencia.
Para verte, amor, amor lejano, amor doliente.
Amor que vives en mí, y no me perteneces.

No hay comentarios: